Nuestra historia
“Que Bonito Es Mi Pueblo”, lo nuevo de Arkangel Musical
Arkangel Musical de Tierra Caliente, ha lanzado su esperado nuevo videoclip titulado “Que bonito es mi pueblo”, del compositor Luis Eduardo Santibáñez, bajo el sello de Santa María
Arkangel Musical de Tierra Caliente, una de las agrupaciones más influyentes en la región, ha lanzado su esperado nuevo videoclip titulado «Que bonito es mi pueblo», del compositor Luis Eduardo Santibáñez, bajo el sello de Santa María Music, el video destaca la gentileza de su gente, la belleza natural, gastronómica y cultural de la región.
Arkangel Musical continúa consolidándose como una de las bandas más queridas y respetadas de Tierra Caliente, demostrando su talento y dedicación en cada nuevo proyecto. Para más información y actualizaciones, visite su sitio web oficial y siga sus redes sociales.
El sur
Descubre el Misterio de la Ex-Hacienda Rodeo Matuz: Tesoro Cultural de Amatepec
Las ruinas de la Ex-Hacienda Rodeo Matuz, erigidas en tiempos de la Revolución Mexicana por el hacendado Antonio Ávila, son testigos mudos de un pasado turbulento y una grandeza perdida en el tiempo.

Entre los cerros que acarician el cielo en el suroeste del Estado de México yace un tesoro cultural: Amatepec. Este rincón geográfico, rodeado de un aroma a café y el sabor de pan recién horneado, se erige como un escenario donde se entrelazan las historias de sus habitantes con la grandeza de su entorno natural. En poco más de 624 km², con una población de 26,334 almas, Amatepec se destaca como un oasis de matices, peculiaridades y tradiciones arraigadas en el corazón de la Tierra Caliente mexicana.





Dentro de este rico tapiz cultural, resalta la Ex-Hacienda Rodeo Matuz, una pequeña población que alberga la esencia misma de la historia mexicana. Con apenas 71 habitantes y unas 17 casas dispersas, este enclave se alza a 918 metros sobre el nivel del mar, entre las carreteras que conectan a Palmar Chico y Bejucos, aproximadamente a una hora de distancia desde ese cruce. Es la última parada del municipio de Amatepec, donde los límites con el vecino Estado de Guerrero se dibujan en el horizonte.
Las ruinas de la Ex-Hacienda Rodeo Matuz, erigidas en tiempos de la Revolución Mexicana por el hacendado Antonio Ávila, son testigos mudos de un pasado turbulento y una grandeza perdida en el tiempo. A través de los relatos de sus descendientes y la memoria colectiva de los habitantes, emerge la figura de Ávila, un hombre alto, fornido, de pelo rubio y barba rojiza, cuya presencia aún parece habitar los pasillos derruidos de la hacienda.
La construcción, erguida con piedra y madera de palma, muestra la destreza y el esfuerzo físico invertido por Ávila y sus trabajadores en su creación. En su interior, se descubren vestigios de una vida pasada: una barda defensiva, un balcón con barandal deteriorado y unas escaleras de piedra que parecen susurrar historias olvidadas.
Sin embargo, más allá de su arquitectura y su historia, la Ex-Hacienda Rodeo Matuz esconde leyendas y misterios que alimentan la imaginación de sus habitantes. Se dice que el espíritu de Antonio Ávila aún deambula por los pasillos, compartiendo su riqueza con aquellos afortunados que cruzan su camino. Relatos como el del señor Silvestre Hernández, quien se topó con dos botes llenos de monedas brillantes frente a la hacienda, hablan de encuentros cercanos con lo sobrenatural que han marcado la memoria colectiva de la comunidad.
Para Amatepec, la Ex-Hacienda Rodeo Matuz representa más que un simple vestigio del pasado; es un recordatorio vivo de la grandeza y la complejidad de la historia mexicana. Su preservación y su valor cultural son un tributo a aquellos que forjaron el destino de esta tierra, y un legado para las generaciones futuras que buscarán entender y honrar su herencia. En este pequeño rincón al sur del Estado de México, la historia sigue viva entre las ruinas de un pasado glorioso.
Fragmentos tomados de la narración de un hecho histórico de Mtra. María Del Carmen Flores Emeterio, elaborado en 2014, por nombre “Riqueza Cultural: Ex Hacienda Rodeo Matuz, Amatepec, Estado de México.